Saltar al contenido

24 de octubre de 2022

Lunes 24 de Octubre de 2.022

Tiempo ordinario/30º

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Lucas 13, 10-17

La enfermedad ata

10Enseñaba (Jesús) en una sinagoga un sábado. 11Había allí una mujer que tenía un espíritu de enfermedad hacía dieciocho años, y estaba encorvada y no podía en modo alguno enderezarse. 12Viéndola Jesús, la llamó y le dijo: Mujer, estás libre de tu enfermedad. 13Le impuso las manos y al instante se enderezó, y glorificaba a Dios. 14Interviniendo el jefe de la sinagoga, lleno de ira porque Jesús había curado en sábado, decía a la muchedumbre: Hay seis días en los cuales se puede trabajar; en ésos venid y curaos, y no en día de sábado.15Respondióle el Señor y dijo: Hipócritas, ¿cualquiera de vosotros no suelta del pesebre su buey o su asno en sábado y lo lleva a abrevar? 16Pues esta hija de Abraham, a quien Satanás tenía ligada dieciocho años ha, ¿no debía ser soltada de su atadura en día de sábado? 17Y diciendo esto, quedaban confundidos todos sus adversarios, y toda la muchedumbre se alegraba de las obras prodigiosas que hacía.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

La enfermedad ata

¿Sabes por qué algunos van contra ti, hombre de fe, mujer de fe viva? Porque el demonio los tiene atados, y son ¡hijos de Satanás! Ya que quien no hace el bien, hace el mal, ya que quien no cumple los mandamientos, peca gravemente; incluso el dejar de honrar al padre y a la madre, es pecado MORTAL.

A ver qué haces, pues.

Si eres religioso y no amas a tus padres, si no los honras de voz, de pensamiento y obras, ¡pecas!

Lo digo, porque algunos entran en un monasterio para salir de la casa paternal, y esto está muy mal. Dios no es un sustituto, ni necesita miedicas de la vida, Dios es fuerte y ama a los fuertes. El monasterio no es un lugar para rezar y a la vez alimentar el rencor adquirido en la niñez, cuando aún la fe no se comprendía bien. ¡Hay que crecer con los años!, hay que adquirir la madurez y vivir la fe en mayor medida, cada vez que pasan los años, porque la experiencia es necesaria en la vida de piedad, para PERDONAR, para COMPRENDER, para no asustarse de las obras de los padres, sean buenas o sean malas. Porque hay también quien se asusta de las obras buenas, como le ocurrió al jefe de la sinagoga, porque a algunos les puede más el título que ostenta, que la fe que representa; este título que le han dado, no para ir contra Dios en sábado, sino que es para apoyarlo en todo, incluso para desatar al demonio.

Hay demonios que martirizan a muchos, que van encorvados por la vida, porque están enfermos y quieren ser curados. Pasan por la “sinagoga”, van a la Iglesia, y Dios quiere curarlos, ¡aún en sábado!, porque saben que sufren y hacen sufrir a otros, ya que el diablo los ha encadenado, y sólo Dios puede desatarlos. Hay que practicar exorcismos, los sacerdotes que deban hacerlo. ¡No tengáis miedo, Dios lo hizo, y vosotros sois destinados a ser otros Cristos!

P. Jesús

© copyright