Saltar al contenido

17 de noviembre de 2021

Miércoles 17 de Noviembre de 2.021

Tiempo Ordinario/33º

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Lucas 19, 11a.12-13.15-26

A todo el que tiene se le dará

11aOyendo ellos esto, añadió Jesús una parábola. 12Dijo, pues: Un hombre noble partió para una región lejana para recibir la dignidad real y volverse; 13y llamando a diez siervos suyos, les entregó diez minas y les dijo: Negociad mientras vuelvo. 15Sucedió que, al volver él, después de haber recibido el reino, hizo llamar a aquellos siervos a quienes había entregado el dinero, para saber cómo habían negociado. 16Se presentó el primero, diciendo: Señor, tu mina ha producido diez minas. 17Díjole: Muy bien, siervo bueno; puesto que has sido fiel en lo poco, recibirás el gobierno de diez ciudades. 18Vino el segundo, que dijo: Señor, tu mina ha producido cinco minas. 19Díjole también a éste: Y tú recibe el gobierno de cinco ciudades. 20Llega el otro diciendo: Señor, ahí tienes tu mina, que tuve guardada en un pañuelo, 21pues tenía miedo de ti, que eres hombre severo, que quieres recoger lo que no pusiste y segar donde no sembraste. 22Díjole: Sabías que yo soy hombre severo, que tomo donde no deposité, y siego donde no sembré. 23¿Por qué, pues, no diste mi dinero al banquero, y yo, al volver, lo hubiera recibido con los intereses? 24Y dijo a los presentes: Quitadle a éste la mina y dádsela al que tiene diez. 25Le dijeron: Señor, ya tiene diez minas. 26Díjoles: Os digo que a todo el que tiene se le dará, y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

A todo el que tiene se le dará

Hijo, hija, ¡cuántos dones te ha dado Dios! ¡Qué alegría! Y… ¿qué vas a hacer con ellos? Dices que pagar deudas y ayudar a la familia.

¡Qué alegría!

Tu fe te ha llenado de Santa Misericordia Divina, y has negociado bien con tu dinero, ahora podrás pagar deudas y ayudar a la familia. Bendito seas y serás, porque Dios te ha dado mucho más de lo que valía, pero así recompensa Dios a los que, por amor a Él, viven su vida de fe.

Todo en tu casa prosperará, porque amas a Dios de verdad, y Él mismo, mediante su Providencia, te cubre todas tus necesidades y te da más, mucho más aún, porque has sido un siervo bueno y fiel, porque no has enterrado tus dones, sino que enseñaste tu fe y las obras de la misma. ¡Disfruta de la vida!, porque es el principio de una nueva etapa, la de la prueba en la abundancia, en la salud y el respeto del mundo. ¡Y mira que cuesta ser fiel en lo mucho!, aunque algunos no lo son ni en lo poco.

Dios te ha bendecido, hijo mío, porque no enterraste tu dinero, sino que ayudaste a la viuda pobre y con hijos huérfanos; quizás no todos ellos fueron capaces de estar a tu altura, pero la pobre viuda y la hija buena, esas desventuradas almas te deben la vida eterna. ¿Crees entonces que eres bien pagado por Dios? Además de la alegría de tu fe, tienes, tendrás, la recompensa profesional. Es que a Dios nadie le gana en bondad, pero lo hace todo a su tiempo, porque antes se va, quiere saber cómo administra su siervo los talentos que le da: los dones de la fe, la esperanza y la caridad, que son virtudes que Dios Padre decide dar a quien tiene un corazón tan grande como el tuyo, en el que, en vez de casa, ayudas a la viuda y das pan a esa casa, y la haces de tu familia, por la fe, por la virtud de imitar a Cristo, el Mesías.

Vas a ser muy feliz, hijo de Dios, porque llega siempre el Señor, y pasa las cuentas siempre.

A Dios le gustan las cosas claras, y sabiendo esto, hiciste bien en ser fiel en lo mucho que Dios te dio: fe.

P. Jesús

© copyright