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14 de junio de 2020

Domingo 14 de Junio de 2.020

Tiempo Ordinario/11º  -Solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Juan 6, 51-58

La Eucaristía, ¿cuál es su valor?

(Dijo Jesús a los judíos): 51Yo soy el pan vivo bajado del cielo; si alguno come de este pan, vivirá para siempre, y el pan que yo le daré es mi carne, vida del mundo.

52Disputaban entre sí los judíos diciendo: ¿Cómo puede éste darnos de comer de su carne? 53Jesús les dijo: En verdad, en verdad os digo que, si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida en vosotros. 54El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna, y yo le resucitaré el último día. 55Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. 56El que come mi carne y bebe mi sangre está en mí y yo en él. 57Así como me envió mi Padre vivo, y vivo yo por mi Padre, así también el que me come vivirá por mí. 58Este es el pan bajado del cielo, no como el pan que comieron los padres, y murieron; el que come este pan vivirá para siempre.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

La Eucaristía, ¿cuál es su valor?

Hubo una vez un millonario que se jactaba de poder comprar todo lo que quisiera para él o para los suyos, pero un día todo su mundo se le vino abajo, cuando alguien le dijo que no podía comprar a Dios, que no podría pagar JAMÁS el valor de una Misa, y que, con todo su dinero, no podía comprar una Eucaristía. Y es que hay cosas que no se pagan, hay cosas que tienen verdadero valor y no se pueden comprar con dinero. ¡Por eso!, porque tienen verdadero valor.

Y, el valor de la fe, ¿crees que tiene precio?… No. Entonces, ten fe, pide con fe, y Dios te dará los medios para hacer dinero, ese dinero que necesitas para cubrir tus necesidades y las de tu familia.

La fe es el medio real de tener capital.

Practica la fe, reza, pídele a Dios Padre, en nombre de Jesús y por intercesión de Santa María, San José, todos los Santos y Ángeles, y vive en Gracia de Dios, haciendo obras de caridad, y ten decisiones de justicia, y valora la guía del Espíritu Santo, y verás grandes cambios en tu vida, también económicos, porque, ¿de quién es el dinero?, el dinero es lo que usan las personas entre ellas para intercambiar productos, servicios, etc. Entonces, te he dado una pista muy clara, sí, la de que hagas algo bueno por los demás y lo negocies como intercambio de actividades de trabajo; esto es lícito y bueno, y hace bien que cobres por tu trabajo; pero se empieza rezando, orando a Dios por lo que quieres. ¿Qué quieres?, decide primero lo que quieres, porque Dios tiene que saber lo que quieres para poder dártelo. Y aunque Dios lo sabe todo, eso ya lo sabemos, debemos también saber y tener claro, que la fe y la oración están unidas a la acción de trabajar para servir a los demás, y además recibir un dinero de compensación y así poder vivir. Y vive mejor el que conoce la ley natural, que es ser servicial, ya que todos formamos parte del mismo plan de Dios, que es la salvación, pero en esta tierra, en este mundo, existe el tiempo, y para vivir hay que comer, y comiendo se crece, y se necesita de vestido, y también hay necesidad de techo; de todo ello, sabe vuestro Padre que tenéis necesidad; por eso reza conmigo, recemos el Padrenuestro:

Padre nuestro, que estás en el Cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu Reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. Amén.

Pero hay que cumplir todo lo que se reza en la oración del Padrenuestro; hay que perdonar, pero perdonar-perdonar de verdad, no de palabra, y punto. Y hay que cumplir con todo lo demás; medita el Padrenuestro, y tendrás vida y vida en abundancia. Y es lo que quieres, ¡lo sé!, y me parece bien.

Cada día reza para ti y los tuyos, un Padrenuestro, y Dios te dará el sustento. ¡Haz la prueba! ¡Mira lo fácil que es!… pero lo más difícil, ahora te lo diré: reza con fe y haz obras de la misma. ¡Ay, ay, ay!… Todo va incluído en el “pack” de recibir, cuanto antes, la gracia de Dios. ¡Claro, para ello, hay que vivir en Gracia! ¡Claro!, la palabra lo dice todo: Gracia.

P. Jesús
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