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Evangelios marzo 2020 - 3. página

2 de marzo de 2020

Lunes 2 de Marzo de 2.020

Tiempo Cuaresma/1º

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Mateo 25, 31-46

Quien ama, se parece a Dios

(Dijo Jesús a sus discípulos): 31Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentarán sobre su trono de gloria. 32Y se reunirán en su presencia todas las gentes, y separará a unos de otros, como el pastor separa a las ovejas de los cabritos, 33y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. 34Entonces dirá el Rey a los que están a su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde la creación del mundo. 35Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; peregriné, y me acogisteis; 36estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; preso, y vinisteis a verme.37Y le responderán los justos: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, sediento y te dimos de beber? 38¿Cuándo te vimos peregrino y te acogimos, desnudo y te vestimos? 39¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte? 40Y el Rey les dirá: En verdad os digo que cuantas veces hicisteis eso a uno de estos mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis.

41Y dirá a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno, preparado para el diablo y para sus ángeles. 42Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; 43fui peregrino, y no me alojasteis; estuve desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis. 44Entonces ellos responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, o sediento, o peregrino, o enfermo, o en prisión, y no te socorrimos? 45El les contestará diciendo: En verdad os digo que, cuando dejasteis de hacer eso con uno de estos pequeñuelos, conmigo dejasteis de hacerlo. 46E irán al suplicio eterno, y los justos, a la vida eterna.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Quien ama, se parece a Dios

A todos haz el bien, por amor a Dios, que es el Sumo Bien, y que hizo el bien a todos, soportando todo de todos y teniendo paciencia y audacia para propagar la fe.

Tú, ama a todos, sean quienes sean, y ayuda a quien puedas; siendo siempre bueno y haciendo el bien, ayudas a todos, a los que ves y a los que no ves, porque no hay cosa que más se propague que el bien, la bondad; y todo ello sin criticar; antes mejor, apartarse que criticar. Sólo se puede decir a otro, algo que hace, si lo que hace va contra la fe; pero si es su manera de ser, ¡no critiques!; si no te gusta cómo es, ¡vete! y busca personas de fe, para estar con los que aman a Dios de verdad; y con ellos, disfruta de una buena vida, ¡la de la caridad!

Las cosas son sencillas, muy sencillas: quien ama, se parece a Dios. ¡Ya ves! Estudia a Dios, Jesús, e imítale en todo, y no juzgues a nadie. Él, a la mujer adúltera, no la sentenció, es más, como Dios, la perdonó y le dijo: “vete y no peques más”. Como puedes ver, la dejó libre, no le dijo: quédate conmigo y pórtate bien, que te vigilo; sino que le dijo: “vete y no peques más”.

Tú, igual; Dios no te juzga, y nadie va a tirarte la primera piedra, si estás delante de Jesús, Dios, y aceptas su perdón y vives luego la fe, si quieres, yendo con Él; si no quieres, no, porque Dios te deja libre y acepta lo que tú quieras.

Yo, de ti, iría con Él, lo seguiría. Amén.

P. Jesús
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