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Evangelios enero 2019 - 30. página

29 de enero de 2019

Martes 29 de Enero de 2.019

Tiempo Ordinario /3º

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Marcos 3, 31-35

Somos familia de Dios

31Vinieron su madre y sus hermanos (de Jesús), y desde fuera le mandaron a llamar. 32Estaba la muchedumbre sentada en torno de Él, y le dijeron: Ahí fuera están tu madre y tus hermanos, que te buscan. 33Él les respondió: ¿Quién es mi madre y mis hermanos? 34Y, echando una mirada sobre los que estaban sentados en derredor suyo, dijo: He aquí a mi madre y a mis hermanos. 35Quien hiciere la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Somos familia de Dios

Los que hacen la voluntad del Padre, son familia de Dios, son familia de Jesús, que es Dios Hijo; tú, tú que haces la voluntad del Padre, que cumples con los mandamientos de la Ley de Dios, tú eres familia de Dios, tú tienes una herencia que vas a recibir en cuanto mueras, y será para siempre TU FELICIDAD.

Hablemos de la paz. Vamos a ver, ¿por qué no tienes paz, si sabes que Dios, Jesús, ganó la guerra por ti?; vas a vivir, como máximo, ciento veinte años, que son los que Dios dio como ultimátum de vida para el hombre, para la persona, y después de vivir en la tierra, ¡alegría!, vas a pasar, ¡de seguro!, a mejor vida, por la salvación que Dios te da, si crees en Él, en que Jesús es Dios, y si obras en todo con Caridad, es decir, haciendo TODAS LAS COSAS para agradar a Dios, que Dios sólo quiere lo bueno, el bien.

Así que, ¿qué problema tienes?; si estás enfermo y vas a morir, que sepas que te espera el Cielo, ¡la dicha sin fin!

Si sufres por gente que no te ama, que sepas que Dios te Ama tanto que vino al mundo y murió por ti, y que todo lo que le pidas te da, con el tiempo, si es bueno. Y si quieres que los que amas, amen a Dios, ¡dales tu ejemplo!, y confía en Dios, que la vida es, para las almas de oración, tiempo de petición. Puede que los que no te aman, no te amarán, pero puede que los que no te aman, por tu oración, amen otro día a Dios, y esto es lo importante, que amen a Dios; y si aman a Dios, OTRO DÍA, como tú, ellos y tú vais a vivir ETERNAMENTE en el Cielo eterno; ¡allí te amarán!; ¿qué problema tienes por esperar?

Si no tienes dinero para pagar tus necesidades vitales y las de tu familia, reduce tus gastos, no aparentes, sé humilde en tu verdad y ten la dignidad de ser realista y de respetarte, porque la pobreza no es humillante, y menos en estos tiempos de crisis mundial, sino que viviendo tu realidad, tendrás paz, y siempre, siempre que hay vida, se puede prosperar, porque Dios da al que vive la verdad, al que es humilde y no aparenta lo que no es, tampoco va quejándose o maldiciendo su destino, sino que se adapta a su realidad y empieza a prosperar desde cero, como tantos lo han hecho, porque un retroceso, no es una derrota, sino que es una oportunidad de empezar y seguir luchando al lado de Dios, que siempre estuvo con Jesús, siempre a su lado, en las buenas y en las malas, y Dios Hijo, Jesucristo, triunfó, aún donde, por la maldad de otros, lo mataron, y antes, lo humillaron, insultándolo, juzgándolo y sentenciándolo a la muerte porque sí, no por nada malo que hubiera hecho, que nada malo hizo; pero calló Dios, y aceptó la muerte para MORIR POR TI, para recibir lo que no quiere que tú recibas, y no es los insultos y dolor en la vida, sino los insultos y dolor en el Infierno, porque en la vida, dijo Jesús, Dios, que todos los que le siguen, vivirían lo mismo que Él, Dios, vivió, persecuciones, maltrato… etc., pero TODO el que quiere, TIENE VIDA ETERNA. ¡Esto es lo MARAVILLOSO!, que tú, tú no vas a pasar por el Infierno, ¡amigo!, tienes ASEGURADA la vida eterna en el Cielo. Ojalá te dieras cuenta de esta verdad; ¡ya tienes asegurada el resto de tu vida después de esta vida terrena, y es el CIELO!; tu futuro lo tienes seguro, sólo tienes que resistir en tu fe, AHORA, cada día, hasta llegar la dicha de irte al Cielo; allí está Cristo y la Virgen María, Ellos, que te atienden ya en esta vida de ahora; reza, ora y pide ayuda a Jesús y a María, y Ellos, te ayudan, porque ambos vivieron para ayudarte. Confía en la Virgen María, Madre de Dios, y disfruta de tu fe. Y me dirás, ¿y la paz, qué?… Y yo te digo, ¿no me digas que no tienes paz, sabiendo que tienes Ganado el Cielo, por Jesús, Dios, que lo ganó por ti?; ¡claro que tienes paz!, porque la paz es saber, tener la certeza de que todo te irá bien, pases lo que pases, todo te irá bien en la ETERNIDAD, y es muy larga la eternidad, ES PARA SIEMPRE. ¿No te da paz saber que pasada esta vida, viene tu vida de ALEGRÍA CRISTIANA?… Piénsalo y ya me dirás… ¡Amigo!

P. Jesús

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