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9 de junio de 2019

Domingo 9 de Junio de 2.019

Tiempo Pascual /8º -Solemnidad de Pentecostés

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Juan 20, 19-23

Jesús se aparece a los Apóstoles

19La tarde del primer día de la semana, estando cerradas las puertas del lugar donde se hallaban reunidos los discípulos por temor de los judíos, vino Jesús y, puesto en medio de ellos, les dijo: La paz sea con vosotros. 20Y diciendo esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron viendo al Señor. 21Díjoles otra vez: La paz sea con vosotros. Como me envió mi Padre, así os envío yo. 22Diciendo esto, sopló y les dijo: Recibid el Espíritu Santo; 23a quienes perdonareis los pecados, les serán perdonados; a quienes se los retuviereis, les serán retenidos.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Jesús se aparece a los Apóstoles

Dios, Jesús, te muestra sus manos y su costado, y aún así dudas de la fe, dudas de que Dios se hiciera hombre en Jesús. Entonces no tienes alegría, vas asustado y solo por la vida. ¡Despierta!

La paz de Dios quiere venir a ti, pero tú la rechazas por no creer en que Jesús es Dios, en que vive, en que resucitó, en que el Hijo de Dios se hizo hombre en las entrañas purísimas de Santa María.

Pierdes las posibilidades de vivir la alegría.

¡Qué pena!

Dices que dudas, que no tienes suficiente fe, que te haces preguntas que no tienen respuesta. Pero, es eso la fe, creer sin tener todas las respuestas.

Vive la fe.

Pide la fe a Dios Padre, en nombre de Jesús. Sé humilde y dile a Dios: “Auméntame la fe”, “Que crea en Jesús”. Y todo lo que pidas, pídelo en nombre de Jesús, y Dios Padre, por Jesús, te lo concederá; para pedir, para hablar con Dios, es cuestión de querer, de voluntad, y no de fe.

Cuando tu vas a ver a tu jefe para pedirle algo, lo haces, no porque sabes que te lo dará, sino porque sabes que existe; pues, todos saben que Jesús existió, la historia habla de Él, y no sólo habla de Él la Sagrada Biblia; pues, por saber que existe, pídele la fe, como muchos escriben, por mediación de un abogado, a un juez, que saben que existe aunque no le conocen.

No hace falta fe para hablar con Dios, que hizo los cielos y la tierra.

No hace falta fe para hablar con Jesús, que es Dios, la historia habla de Él. Entonces, habla con Dios, dile que no tienes nada de fe, aunque sabes que existió y que se llama Jesús, y que Él mismo dijo de Sí mismo que era Dios, y que hizo milagros, actos inexplicables acontecieron por su nombre, en la persona de Jesús, cuando se lo pedía a Dios.

Tú habla con Jesús, existió.

Tú habla con Dios, creó el mundo.

Tienes pruebas de su vida, de que vivió; y yo te digo que vive, y que por el bautismo vive en ti, y que por los sacramentos de la Penitencia y la Eucaristía, Él, Dios, Jesús, vive en ti y va donde tú vas, y te ayuda a ser santo-a. Es de fe.

P. Jesús
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