Sábado 9 de Diciembre de 2.023
Tiempo Adviento/1º
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Evangelio:
San Mateo 9, 35-38 y 10, 1.5a 6-8
A los perdidos, hay que ayudar
35Jesús recorría ciudades y aldeas enseñando en sus sinagogas, predicando el evangelio del reino y curando toda enfermedad y toda dolencia.36Viendo a la muchedumbre, se enterneció de compasión por ella, porque estaban fatigados y decaídos, como ovejas sin pastor. 37Entonces dijo a los discípulos: La mies es mucha, pero los obreros pocos.38Rogad, pues, al dueño de la mies que envíe obreros a su mies.
Mt 101Jesús, llamando a sus doce discípulos, les dio poder sobre los espíritus impuros, para arrojarlos y para curar toda enfermedad y toda dolencia.
5A estos doce los envió Jesús, haciéndoles las siguientes recomendaciones: No vayáis a los gentiles ni penetréis en ciudad de samaritanos; 6id más bien a las ovejas perdidas de la casa de Israel, 7y en vuestro camino predicad diciendo: El reino de Dios se acerca. 8Curad a los enfermos, resucitad a los muertos, limpiad a los leprosos, arrojad los demonios; gratis lo recibís, dadlo gratis.
Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)
«Palabra del Señor»
«Gloria a ti Señor Jesús»
Meditación:
A los perdidos, hay que ayudar
Esos que conocen la fe y no la cumplen, a estos hay que ayudar, porque recuperada su fe, aumentada su fe, harán Iglesia, y la Esposa de Cristo resplandecerá, y los demás lo verán, y su brillo de amor, de caridad, hará venir a muchísimos que necesitan de Dios, no de ti; necesitan de Dios, que vive en ti.
Viva Dios en ti, por tú recibir los sacramentos. Esto es lo bueno, ¡lo mejor!, lo mejor para ti y para todos. Sí, porque la Gracia de Dios pone luz en tu vida, y alumbras toda tu casa, y las casas vecinas.
Sé luz, por tu fe. Amén.
P. Jesús
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