Miércoles 8 de Enero de 2.014 / 2º de Navidad
Evangelio:
San Marcos 6, 34-44 Una gran muchedumbre Mar 6:34 Al desembarcar vio una gran muchedumbre, y se compadeció de ellos, porque eran como ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles largamente. Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) «Palabra del Señor» «Gloria a ti Señor Jesús» |
Meditación:
Una gran muchedumbre Parece que alguno de los que vinieron ayer, hoy no están, pero veo muchas caras nuevas; primero, a presentarnos, porque, ¿cómo vamos a hablar de la verdad, si no nos conocemos?; así que apretaros un poquito, que quiero, uno a uno, daros la bendición, y que me digáis, qué tal estáis hoy; ¿cómo habéis dormido?, porque es muy de mañana, y seguro que alguno ha venido sin haber desayunado. ¿Alguien trae algo para repartir, con estos que no han comido?, porque hay que comer; como hay que saber, uno tiene que alimentar su estómago y su mente. El ayuno es para los que ya saben mucho; cuando no se sabe, mejor que se coma, porque cuando alguien ayuna sin saber el cómo y el porqué, puede ser contraproducente; el ayuno es cosa de grados superiores de fe, y pocos de los que estáis aquí podéis responderme bien si Dios existió desde siempre. ¡Vaya con ese que me dice, me pregunta, si yo lo sé! ¡Claro que lo sé!, un maestro tiene que saber, si no sabe, que se haga alumno de uno que sí sabe. Vamos a ver, ¿qué opinas tú de si Dios existe desde siempre?… Dices que sí, pero que no tienes pruebas, ninguna, para exponerlas a favor de esta creencia, la de que Dios existe desde siempre. Yo, yo, tengo pruebas, pero, ¡Dios!, se me ha hecho tarde, como ayer, así que tendremos que dejarlo para mañana. ¡Un abrazo hermano-a! P. Jesús © copyright |