Miércoles 3 de Noviembre de 2.021
Tiempo Ordinario/31º
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Evangelio:
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San Lucas 14, 25-33 Primero Dios 25Se le juntaron (a Jesús) numerosas muchedumbres, y, vuelto a ella, les decía: 26Si alguno viene a mí y no aborrece a su padre, a su madre, a su mujer, a sus hijos, a sus hermanos, a sus hermanas y aun a su propia vida, no puede ser mi discípulo. 27El que no toma su cruz y viene en pos de mí no puede ser mi discípulo. 28¿Quién de vosotros, si quiere edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos a ver si tiene para terminarla? 29No sea que, echados los cimientos y no pudiendo acabarla, todos cuantos lo vean comiencen a burlarse de él diciendo: 30Este hombre comenzó a edificar y no pudo acabar. 31¿O qué rey, saliendo a campaña para guerrear con otro rey, no considera primero y delibera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil? 32Si no, hallándose aún lejos de aquél, le envía una embajada haciéndole proposiciones de paz. 33Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncie a todos sus bienes, no puede ser mi discípulo. Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) «Palabra del Señor» «Gloria a ti Señor Jesús» |
Meditación:
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Primero Dios ¿Por qué no puede ser primero Dios en tu vida?… Vamos, dímelo, ¿qué te pasa? Te cuento de qué va tu vida; va de ir al encuentro de Dios, porque es con Dios con quien vas a compartir toda tu eternidad; así que es Dios y sólo Dios lo que más te interesa conocer y amar, porque es Él quien vive y está en el Reino de los Cielos. Toda tu trayectoria humana, es simplemente para que regreses al encuentro de tu Creador, para que lo aceptes como a tu Dios, y vivas para Él y con Él. Sabes bien, que incluso los viudos, se vuelven a casar y vuelven a amar a otra persona, igual o más que a la que amaron la primera vez que se casaron; entonces, sabes bien que tu cónyuge, por mucho que os améis, si uno de los dos muriera, tu lugar lo podría ocupar otra persona; y, ¿entonces qué pasaría en el Cielo, cuál sería su cónyuge?; ¿la persona que más habrías amado?; ¿y qué pasaría con la que hubiera muerto primero y no hubiera amado a nadie más que a su amor primero?… ¿Y tantos noviazgos que no acaban en nada, ¡tantos!? Hijos que abandonan a sus padres. Padres que abandonan a sus hijos. Hermanos que riñen y discuten… se enfadan y se separan. ¡Sólo Dios es fiel y está siempre contigo! Ten tu vida de piedad, no te olvides de rezar y haz mucha oración con el Autor de tus días, porque es Él, Dios, tu Dueño y Señor; cuanto antes se te aclaren las ideas y lo aceptes, mejor. Dios te da independencia, pero sí o sí, eres suyo; eres obra de sus manos, eres parte de su Amor. ¡Dios te ama! Primero Dios, para ti, incluso antes que tú. P. Jesús © copyright |
