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24 de julio de 2017

Lunes 24 de Julio de 2.017

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Mateo 12, 38-42

Condiciones a la fe

Mat 12:38 Algunos escribas y fariseos, dijeron a Jesús: «Maestro, quisiéramos ver una señal tuya».
Mat 12:39 Él, respondiendo, les dijo: «La generación mala y adúltera busca una señal, pero no le será dada más señal que la de Jonás el profeta.
Mat 12:40 Porque, como estuvo Jonás en el vientre de la ballena tres días y tres noches, así estará el Hijo del hombre tres días y tres noches en el seno de la tierra.
Mat 12:41 Los ninivitas se levantarán el día del juicio contra esta generación y la condenarán, porque hicieron penitencia a la predicación de Jonás, y hay aquí cosa mayor que Jonás.
Mat 12:42 La reina del Mediodía se levantará en el juicio contra esta generación y la condenará, porque vino de los confines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón, y aquí hay cosa mayor que Salomón.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Condiciones a la fe

Hay quien pide condiciones a la fe. Es decir, se dicen: “para tener yo fe, antes quiero que Dios obre algún milagro, para así creer en Él.”

Y lo mismo ocurre en esta otra versión que dicen también algunos: “No creeré que Dios ama y está en esta persona de fe, hasta que no vea que la proteja de todo el mal que le estoy haciendo y le voy a hacer.”

¡Cuánta paciencia tiene Dios con los sin fe!

¡Y cuánta más con los que van y obran de mala fe!

«¡Generación malvada y adúltera! Una señal pide, y no se le dará otra señal que la señal del profeta Jonás.»

Palabras de Dios, que también pueden ser aplicadas hoy, a estos que no tienen fe y que prueban con su falta de fe, la fe de los creyentes.

Ve a confesarte de no perdonar a los que no tienen fe, y que por esto mismo, te ponen en tantas pruebas, y pasas por tantas tristezas, que pudiendo ser causa de alegría, por la caridad con que deberías vivir tu vida, en vez de esto, renuncias a demostrar a Dios que le amas sobre todas las cosas y personas, y te obsesionas por los que no teniendo fe, pretenden que pierdas la tuya.

Haz como Jesús y dile a Dios Padre: “perdónalos porque no saben lo que hacen”. Pero como tú no eres Dios, no eres Jesús, tienes que ir a Dios en la confesión. Porque esta es la manera ÚNICA que tiene el pecador de conectar con Dios, mediante la confesión ante un sacerdote católico, que hace de vía, de conducto entre el pecador y Dios; porque de no ser por el sacerdote, Dios no tendría contacto directo con el pecador, con el que peca contra uno o varios de los mandamientos de su Ley, de la Ley de Dios. El sacerdote que te confiesa, recibe tus pecados, al oírlos, y su sacramento sacerdotal hace la acción de intercesión en tu diálogo directo con Dios, porque quien te perdona cuando recibes la absolución, ES EL MISMO DIOS, no es el sacerdote, sino Dios, que por el Santo Sacramento Sacerdotal, la SSS, tú puedes relacionarte con Dios y recibir su perdón y sentir su Amor, que recibes SIEMPRE después de una buena confesión.

Sin el sacerdote, no tendrías ese perdón verdadero, que las almas muchas veces notan, después de confesarse bien ante un sacerdote católico.

Porque no se puede ir a comulgar, sin confesar antes tus pecados.

Y te estaba diciendo y te digo, que debes pedir perdón a Dios en la confesión, por si te ha costado o te cuesta perdonar al que no teniendo fe, te prueba la tuya. Así que ya sabes, te espero en el confesonario. ¡Ven!

P. Jesús

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