Viernes 22 de Julio de 2.016
Evangelio:
San Juan 20, 1.11-18 Aparición a María Magdalena Joh 20:1 El día primero de la semana, María Magdalena vino muy de madrugada, cuando aún era de noche, al monumento, y vio quitada la piedra del monumento. Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) «Palabra del Señor» «Gloria a ti Señor Jesús» |
Meditación:
Aparición a María Magdalena Dios se aparece a esta mujer, que se desvive por Él, que va temprano a la tumba para cumplir con su deber, a pesar de estar muy triste, a pesar de no tener motivos de fe, a pesar de sentir que se muere de dolor por la pérdida del Maestro. Y Dios, a ella le da las primicias de la Resurrección, por ser fuerte y, a pesar de todo, cumplir con lo que hay que hacer. Dios hace lo mismo contigo, y con ésa, que le han dicho que debe abortar, porque el bebé tiene malformaciones y no sobrevivirá; y ella cumple con su deber, y se mantiene firme ante su responsabilidad de madre, de defender la vida, de proteger a su hijo, que depositado en sus entrañas, la ama más que ninguna otra persona la amará. ¡Es la ley de la naturaleza! Es sentencia. Dios ama, ama a las personas que, sobreponiéndose al dolor, a las difíciles circunstancias en que la vida ha podido enredarles, sea por sus obras o las obras de otros, pero sea como sea, no es un paraíso su vida, sino más bien un calvario, una cruz con dolor y soledad; Dios, a estas personas, sólo les pide una cosa, ¡sólo una!, que le dejen mostrar su Santa Misericordia. ¿Le vas a dejar? Di que sí. P. Jesús © copyright |