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20 de junio de 2015

Sábado 20 de Mayo de 2.015

Evangelio:

San Mateo 6, 24-34

Algunos, por miedo, no quieren trabajar

Mat 6:24 Dijo Jesús a sus discípulos: «Nadie puede servir a dos señores, pues o bien aborreciendo al uno, menospreciará al otro, o bien adhiriéndose al uno menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.
Mat 6:25 Por esto os digo: No os inquietéis por vuestra vida, sobre qué comeréis, ni por vuestro cuerpo, sobre qué os vestiréis. ¿No es la vida más que el alimento y el cuerpo más que el vestido?
Mat 6:26 Mirad cómo las aves del cielo no siembran, ni siegan, ni encierran en graneros, y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros más que ellas?
Mat 6:27 ¿Quién de vosotros con sus preocupaciones puede añadir a su vida un solo codo?
Mat 6:28 Y del vestido, ¿por qué preocuparos? Mirad a los lirios del campo cómo crecen: no se fatigan ni hilan.
Mat 6:29 Yo os digo que ni Salomón en toda su gloria se vistió como uno de ellos.
Mat 6:30 Pues si a la hierba del campo, que hoy es y mañana es arrojada al fuego, Dios así la viste, ¿no hará mucho más con vosotros, hombres de poca fe?
Mat 6:31 No os preocupéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, qué beberemos o qué vestiremos?
Mat 6:32 Los gentiles se afanan por todo eso; pero bien sabe vuestro Padre celestial que de todo eso tenéis necesidad.»
Mat 6:33 Buscad, pues, primero el reino y su justicia, y todo eso se os dará por añadidura.
Mat 6:34 No os inquietéis, pues, por el mañana; porque el día de mañana ya tendrá sus propias inquietudes; bástale a cada día su afán.»

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Algunos, por miedo, no quieren trabajar

Si tú eres de estos que, por las palabras de Jesús, temes al dinero y no quieres trabajar para no tenerlo, y así no perder la santidad, por miedo a las palabras de Jesús, que dice que no se puede amar a Dios y al dinero, piensa que estas palabras las dijo Jesús antes de darnos sus sacramentos, ya que también nos dice que con Dios, todo lo puedes. Sí que es difícil no amar tanto el dinero, como uno tiene que amar a Dios, como es difícil para el soltero, no fornicar, pero los solteros católicos, por los sacramentos, pueden ser santos, viviendo la virginidad y la pureza, así como los ricos pueden tener santidad, dando limosna y creando puestos de trabajo, dando un sueldo más que digno; y aunque la ley civil tiene unas cuotas mínimas para el trabajador, el buen católico sabe que no es suficiente, que se necesita más dinero para llevar una vida decente. ¡Cuántos pecados se cometen por los ricos usureros, explotadores y avariciosos!; todos los pecados que cometen los trabajadores, por no alcanzarles el sueldo, recaen sobre los dueños de su trabajo; así que no presuman tanto, esos malos empresarios. Por otro lado, están los trabajadores que temen -como he dicho antes- hacer dinero, por si su amor al dinero los separa de su fe. Como he dicho antes y repito ahora, hay los sacramentos, y en ellos, Dios mismo que ayuda, te ayuda. Y si procuras no tener pecados, acordémonos del noveno mandamiento de la Ley de Dios, podrás trabajar o dar trabajo y/o salvarte por el buen uso de tu dinero, voluntad e inteligencia. ¡No tengas miedo! Y no es necesario para el laico, pasarse el día leyendo la Biblia, que tantos usan como libro de videncia, abriendo sus páginas cada dos por tres, para saber lo que Dios quiere de él. Y te digo, Dios quiere de ti que trabajes con el sudor de tu frente y tengas hijos, para que el pueblo elegido se llene, y pueblen el Reino Celestial, donde Dios espera a los hombres de buena voluntad.

P. Jesús

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