17 de mayo de 2016

Mar 9:30 Saliendo de allí, Jesús y sus discípulos atravesaban de largo la Galilea, queriendo que no se supiese.
Mar 9:31 Porque iba enseñando a sus discípulos, y les decía: «El Hijo del hombre será entregado en manos de los hombres y le darán muerte, y, muerto, resucitará después de tres días».
Mar 9:32 Y ellos no entendían estas cosas y temían preguntarle.
Mar 9:33 Vinieron a Cafarnaúm, y, estando en casa, les preguntaba: «¿Qué discutíais en el camino?»
Mar 9:34 Ellos se callaron, porque en el camino habían discutido entre sí sobre quién sería el mayor.
Mar 9:35 Sentándose, Jesús llamó a los Doce, y así les dijo: «Si alguno quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos».
Mar 9:36 Y tomando un niño, lo puso en medio de ellos, y, abrazándole, les dijo:
Mar 9:37 «Quien recibe a uno de estos niños en mi nombre, a mí me recibe, y quien me recibe a mí, no es a mí a quien recibe, sino al que me ha enviado».

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»