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14 de noviembre de 2021

Domingo 14 de Noviembre de 2.021

Tiempo Ordinario/33º

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Marcos 13, 24-32

Los Ángeles de Dios

(Dijo Jesús a sus discípulos): 24Pero en aquellos días, después de aquella tribulación, se oscurecerá el sol, y la luna no dará su brillo, 25y las estrellas se caerán del cielo, y los poderes de los cielos se conmoverán. 26Entonces verán al Hijo del hombre venir sobre las nubes con gran poder y majestad. 27Y enviará a sus ángeles, y juntará a sus elegidos de los cuatro vientos, del extremo de la tierra hasta el extremo del cielo.

28Aprended de la higuera la parábola. Cuando sus ramas están tiernas y echan hojas, conocéis que el estío está próximo. 29Así también vosotros, cuando veáis suceder estas cosas, entended que está próximo, a la puerta. 30En verdad os digo que no pasará esta generación antes de que todas estas cosas sucedan. 31El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.

32Cuanto a ese día o a esa hora, nadie la conoce, ni los ángeles del cielo ni el Hijo, sino sólo el Padre.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Los Ángeles de Dios

Maravillosas criaturas celestiales, oh excelsos espíritus de bien y bondad, que eligieron libremente servir a Dios y renunciar a sí mismas, para, en todo, agradar a Dios. Así tú debes hacer, como ellos, ser de Dios, todo entero.

Los ángeles sirven a las personas, y ven todo lo que hacen, porque Dios se lo muestra, si están unidos a Él, para hacernos el bien. Ellos no se escandalizan de los pecados ni de los pecadores, ellos quieren acercarlos a Dios, y no les importa nada más que ayudarles, aunque sean personas muy malvadas.

Tú, a veces, ves a gente que se porta mal, muy mal; y algunos, lo que hacen, es hacer ver que no lo ven, y dicen: “yo no veo nada”, porque, por no ver el momento en que se unen para hacer el acto sexual, no quiere decir que no sepan que lo hacen; y entonces, saben que son pareja de hecho, o de encuentros fortuitos, pero dicen que no ven su pecado, porque claro, no hacen sus actividades sexuales delante de todos. Esa manera de excusar, traerá consecuencias, porque ¿quién se fiará de ti, que no ves nada malo en los que pecan?… Vas a llorar mucho, y sufrirás por no haber ayudado a los demás a ser mejores, porque el Cielo se pierde por el pecado, ¡se pierde!, es decir, el pecador se va al Infierno; y no hay nada más loable que ayudar a otros a salvarse.

Si la gente que dice ser creyente, ayudara a los que pecan, tan sólo aceptando que no obran bien y dándoles buen ejemplo; ¿cómo?, no permitiendo que, en su casa, duerman juntos, y vayas luego diciendo que no ves nada. Te digo que este pecado que haces al permitir esto, sabiendo que está mal, te llenará de desgracias, y luego sufrirás y llorarás, porque la naturaleza cobra, en su momento, los pecados que has permitido y que, incluso, has contribuido, apoyándolos y diciéndo: “oh, están enamorados”. El amor no es amor cuando hay pecado.

Hay que hacer como los Ángeles, y vivir para agradar a Dios y ayudar a otros a su salvación, porque nadie se salva solo; siempre ayuda a otros, porque el ejemplo y las santas palabras, son fuertes anclas a la fe.

Puedes rectificar, no temas no ser mundano, porque los cristianos no son mundanos, son del mundo, viven en el mundo para ayuda de muchos.

¡Ánimo!, Dios perdona a todos y a todo, si se es humilde, se confiesa uno y se rectifica.

¡Es tiempo de la fe!

P. Jesús

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