Saltar al contenido

30 de abril de 2016

Sábado 30 de Abril de 2.016

Evangelio:

San Juan 15, 18-21

Odio del mundo contra Jesús y los suyos

Joh 15:18 Dijo Jesús a sus discípulos: «Si el mundo os aborrece, sabed que me aborreció a mí primero que a vosotros.
Joh 15:19 Si fueseis del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, sino que yo os escogí del mundo, por esto el mundo os aborrece.
Joh 15:20 Acordaos de la palabra que yo os dije: «No es el siervo mayor que su señor. Si me persiguieron a mí, también a vosotros os perseguirán; si guardaren mi palabra, también guardarán la vuestra».
Joh 15:21 Pero todas estas cosas las harán con vosotros por causa de mi nombre, porque no conocen al que me ha enviado».

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Odio del mundo contra Jesús y los suyos

Si tú odias, es que no eres de Dios, es que no eres discípulo de Jesús; porque va al revés, los que odian no son de Dios, son del mundo. Así que para saber si eres de Dios, te pregunto: ¿Odias?… si tu respuesta es que sí, que sientes odio por alguien, por algo… por ti mismo, entonces no eres de Dios, eres del mundo. Los que dejan que Dios los Ame, esos se llenan del amor de Dios. Si odias a alguien, es que él-ellos son tan importantes para ti, que los has proclamado tu dios; o te has proclamado a ti mismo como a dios. ¡No es discípulo de Cristo, todo aquel que odia!, porque no conoce el Amor de Dios. ¡Claro que te hacen daño! ¡Claro que tienes penas y sufrimientos! Eso es parte de la vida, eso es vivir. Vivir es pasar por lo que pases, sin odiar a nadie, ni a ti mismo. Y si antes pecaste, y ahora te duele tu pecado, ¡no te odies!, porque si te odias, te haces dios pagano de ti mismo. Que sepas que Dios te ama, y que sepas que debes amarte. ¡Mejorarás! Ya lo verás… en poco tiempo, si me sigues leyendo y meditando lo que te digo; verás que puedes amarte, que debes amarte, porque Dios te amó, incluso mientras pecabas; ¿o por qué crees si nó que ahora me estás leyendo?; por la Gracia de Dios, que quiere consolarte de tu desconsuelo de haber sido malo algunas veces. ¡Acéptalo! Acepta que pecaste; y acepta que como tú, muchos pecan, aunque no es en las mismas cosas, quizás, que las que tú pecaste. Hay toda una gama de pecados; lee, lee los mandamientos, y verás cuántas barbaridades puede llegar a hacer una persona ignorante. ¡Ay…!

P. Jesús

© copyright