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3 de febrero de 2018

Sábado 3 de Febrero de 2.018

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Marcos 6, 30-34

Venid vosotros solos a un lugar apartado

30Volvieron los apóstoles a reunirse con Jesús y le contaron cuanto habían hecho y enseñado. 31Él les dijo: Venid, retirémonos a un lugar desierto para que descanséis un poco, pues eran muchos los que iban y venían y no tenían tiempo ni para comer. 32Fuéronse en la barca a un sitio desierto y apartado. 33Pero les vieron ir, y muchos supieron dónde iban, y, a pie, de todas las ciudades concurrieron a aquel sitio y se les adelantaron. 34Al desembarcar vio una gran muchedumbre, y se compadeció de ellos, porque eran como ovejas sin pastor, y se puso a enseñarles largamente.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Venid vosotros solos a un lugar apartado

Hijo, hija, Dios te llama, quiere que vayas a solas con Él, a un lugar apartado, allí donde descanses junto a tu fe.

A veces es necesario que descanses, ¡ve ante el Sagrario! A solas, y allí, junto a Jesús, descansa con Él. Porque la vida te es dura, te es complicado vivir entre angustias que te hacen infeliz, no por no ser bueno, sino que precisamente eres infeliz por ser bueno, porque los demás te cansan con sus mediocridades y maldades, y tú, ¡como héroe!, aguantas sus impertinencias y maldades, y te mortificas.

Estás cansado-a, lo sé.

Dios tiene compasión de esta multitud, que no saben lo que hacen, y te utiliza a ti, para que le ayudes a cambiar al mundo. Sé que no estás preparado-a para tanto sufrimiento, pero Dios está contigo, y todo lo bueno que haces, es bien visto por Él; y su bendita Madre, que os mira a los dos, no para de pedirle por ti, para que sea Él, Jesús, tu Hermano mayor, el Primogénito de Dios, quien continúe cargando con el mayor peso de tu cruz.

Vendrán tiempos de paz para ti, ¡sí!

María, tu Madre y Madre de Dios, conseguirá de Dios Padre una tregua, para que descanses un poco, y así puedas seguir siendo este siervo bueno y fiel, que tánto Dios necesita para cambiar la vida.

Mira, Jesús te llama, quiere que vayas a descansar con Él. ¡Ve!

P. Jesús

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