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24 de septiembre de 2016

Sábado 24 de Septiembre de 2.016

Evangelio:

San Lucas 9, 43b-45

Admírate de las maravillas de Dios

Luk 9:43b Admirándose todos de cuanto hacía Jesús, dijo Él a sus discípulos:
Luk 9:44 «Estad atentos a lo que voy a deciros: El Hijo del hombre ha de ser entregado en poder de los hombres».
Luk 9:45 Pero ellos no sabían lo que significaban estas palabras, que estaban para ellos veladas, de manera que no las entendieron, y temían preguntarle sobre ellas.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Admírate de las maravillas de Dios

Dios fue entregado al poder que tienen los hombres, y, ¿qué poder tienen?, el poder de hacer el bien o el mal.

Y fue utilizado el poder del mal, porque por maldad, mataron a Jesús, Dios.

Este es el poder de la persona, es el poder que tú, ¡tú!, tú posees; tú puedes hacer el bien o hacer el mal, construir o destruir; puedes amar u odiar, puedes bendecir o maldecir, puedes perdonar o vengarte.

¿Qué haces?

¿Qué has hecho?

¿Qué harás?

Si te has vengado alguna vez, ya sabes lo que pasa ¿no?, que si lo consigues, ¡has pecado contra Dios!, y si no lo has conseguido, aún te has llenado de más rencor. Te propongo que reces a la Virgen del Perdón, y que le cuentes todo y le pidas que Ella hable de todo esto con Dios, porque la Virgen María está en el Cielo y conversa con Dios Padre y Dios Hijo y Dios Espíritu Santo; y Ella será tu abogada, y Dios la escucha y la escuchará, y te calmará, eso seguro, y luego, pueden pasar días, meses o años, pero Dios hará tu justicia, si tú no haces nada malo y te confías a Él para que aclare las cosas y los ánimos; te propongo que intentes, de ahora en adelante, hacer esto, no vengarte, y hablar con tu Madre y Madre de Dios, en oración íntima, personal, SECRETA; y le pides sea tu abogada, porque Ella, María es ABOGADA NUESTRA; estuvo a los pies de la Cruz, y estará a tu lado todo el rato, todo el tiempo, todo lo que sea necesario; ella se ocupará de que lo tengas, de que no sufras más de lo que tus fuerzas puedan resistir. Confía en María, y ¡adelante!, tú prosigue con tu vida de Gracia, porque el plan es que estés viviendo en Gracia santificante, en Gracia de Dios, por no pecar, por no querer pecar, por dejar las cosas en manos de Dios, a través de nuestra abogada: María, la Bella María, la Buena María, la Sacrificada y Fiel María, llena de Gracia.

Si tienes odio… de esto te hablaré mañana.

P. Jesús

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