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16 de abril de 2016

Sábado 16 de Abril de 2.016

Evangelio:

San Juan 6, 60-69

Efecto de la verdad en los discípulos

Joh 6:60 Luego de haberle oído, muchos de sus discípulos dijeron: «¡Duras son estas palabras! ¿Quién puede oírlas?».
Joh 6:61 Conociendo Jesús que murmuraban de esto sus discípulos, les dijo: «¿Esto os escandaliza?
Joh 6:62 Pues ¿qué sería si vierais al Hijo del hombre subir allí a donde estaba antes?
Joh 6:63 El espíritu es el que da vida; la carne no aprovecha para nada. Las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida;
Joh 6:64 pero hay algunos de vosotros que no creen». Porque sabía Jesús, desde el principio, quiénes eran los que no creían y quién era el que había de entregarle.
Joh 6:65 Y decía: «Por esto os dije que nadie puede venir a mí si no le es dado de mi Padre».
Joh 6:66 Desde entonces muchos de sus discípulos se retiraron y ya no le seguían.
Joh 6:67 Y dijo Jesús a los Doce: «¿Queréis iros vosotros también?»
Joh 6:68 Respondióle Simón Pedro: «Señor, ¿a quién iríamos? Tú tienes palabras de vida eterna,
Joh 6:69 y nosotros hemos creído y sabemos que tú eres el Santo de Dios».

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Efecto de la verdad en los discípulos

Dijo Jesús: “El espíritu es el que da vida, la carne no sirve de nada”. Y todos, o casi todos, ahí en la vida, mirando, procurando por lo que no vale nada, por este cuerpo que es polvo, que es del mundo.

Hay que tener en cuenta todas las palabras de Jesús, y si dijo que el espíritu es el que da vida, pues eso, lo espiritual es más importante que lo carnal, pero por cómo usamos de lo carnal, sabe Dios cómo estamos espiritualmente. Creo que algunos están muertos de hambre, porque no miran por lo que da la vida sino por lo que no sirve de nada. Habrá que enseñarles con el ejemplo. ¿Quién se apunta? ¿Tú? Perfecto, uno más que vive y vivirá para siempre, tú.

P. Jesús

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