Saltar al contenido

14 de mayo de 2018

Lunes 14 de Mayo de 2.018

Tiempo Pascual /7º – Fiesta de San Matías, Apóstol

Misal virtual de hoy AQUÍ

Evangelio:

San Juan 15, 9-17

Permaneced en Mi amor

(Dijo Jesús a sus discípulos): 9Como el Padre me amó, Yo también os he amado; permaneced en mi amor. 10Si guardareis mis preceptos, permaneceréis en mi amor, como yo guardé los preceptos de mi Padre y permanezco en su amor. 11Esto os lo digo para que yo me goce en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.12Este es mi precepto: que os améis unos a otros, como yo os he amado. 13Nadie tiene amor mayor que éste de dar uno la vida por sus amigos. 14Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que os mando. 15Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os digo amigos, porque todo lo que oí de mi Padre os lo he dado a conocer. 16No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he destinado para que vayáis y deis fruto y vuestro fruto permanezca, para que cuanto pidiereis al Padre en mi nombre os lo dé. 17Esto os mando, que os améis unos a otros.

Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944) 

«Palabra del Señor»

«Gloria a ti Señor Jesús»

Meditación:

Permaneced en Mi amor

No os vayáis de la fe, seguid unidos a Dios, usando de la Comunión, recibiendo la Eucaristía y haciendo de tu vida una alianza de amor con Dios. Atrévete a ser fiel a Dios, a Jesús, atrévete a apartarte del pecado y a confesar, siempre que lo necesites, tus pecados cometidos. Que la muerte de Dios, de Jesús, no haya sido para ti un acto vano. Dios quiere darte la vida eterna, Dios quiere reinar para ti, en la tierra y en el Cielo. Deja que Dios te llene con su Amor, y vive de la fe, haciendo obras de la misma.

Dios tiene sus esperanzas puestas en ti. Quiere que le aceptes libremente, quiere que te salves.

No temas a la cruz, ¡ama la cruz!, este dolor que vives por aceptar a Cristo como a tu Dios, por seguirle, por anunciar el Evangelio. Dios te protege de todo mal, y todo lo que vives es providencial para un bien, porque Jesús, Dios, es el dueño del Bien, Dios es el Sumo Bien; entonces, no te extrañes de sufrir como Cristo mismo sufrió, sufrir para vivir tu vida, la vida que libremente eliges, la vida de servir a Dios en caridad hacia todos, por todos, por ti.

Vive feliz en el amor de Dios y llevando tu cruz.

Dios vive, vive en ti que sufres.

P. Jesús

© copyright